Tiempo de ayuno y oración – Propuesta semanal para el 10 de febrero

09 Feb 2021
en Espiritualidad y devoción
Tiempo de ayuno y oración – Propuesta semanal para el 10 de febrero

Nosotros… una puerta abierta para el encuentro con Dios

La Biblia es rica en imágenes y símbolos para explicarnos las cosas más profundas de Dios.

El lenguaje bíblico es un lenguaje sacramental, porque el mismo Dios nos habla de esta manera: con signos y señales que nos ayudan a descubrir su presencia en medio nuestro.

A través de su vida, sus palabras y su práctica conocemos al Dios de la Vida y nos encontramos con Él.


Con la Biblia en la mano


«Si me conocen a mí, también conocerán al Padre» Juan 14:7

«El que me ha visto a mí ha visto al Padre» Juan 14:9


Hablar con imágenes permite recuperar el lenguaje sencillo de la Biblia, que llega al corazón e invita al cambio de vida.


Para imaginar


Hay muchas imágenes que podemos asociar para profundizar en la misión. Una de ellas es la imagen de la «puerta». ¿PREGUNTAMOS? ¿Qué es una puerta???… La respuesta puede ser:

La puerta es un instrumento que comunica espacios, que abre a una interioridad.

  • Pensemos cómo puede ser una puerta. Las hay grandes, pequeñas, de madera, metal, vidrio u otros materiales, pesadas, livianas, nuevas, antiguas… todas tienen en común la capacidad de abrirse y dejar paso. La puerta tiene mucho que decirnos a nuestra vida de cristianos. ¿Por eso pensemos, qué puerta somos?
  • Ser puerta significa aceptarse como instrumento y tener claro que nuestra misión es quedar abiertos, ir perdiendo protagonismo para que otro/a pueda encontrarse con Dios y su Palabra.
  • Si en nuestro corazón anida el Señor, será cuestión de abrir la puerta para enseñar que Él nos anima, nos da fuerza y esperanza. Abrir la puerta es dar testimonio, hablar desde el corazón y la experiencia. Invitar al encuentro y presentar al Dios que llena nuestros días.

Estamos llamados a ser puertas abiertas, porque el Señor a quien seguimos nos dice que El mismo es puerta, para el encuentro y la vida.


Leemos: Juan 10: 9


Jesús mismo se presenta como la Puerta. El acceso a la vida. Él, como buen pastor, nos conoce, nos quiere y busca lo mejor para nosotros. Juan lo expresa con imágenes tan delicadas como cuidar, proteger y dar alimento. Ese es nuestro Dios, el que nos abre su vida (nos da su vida) para que podamos vivir mejor.

Nosotros… una puerta abierta para el encuentro con Dios

  • Relee el texto de Juan. «Yo soy la puerta: el que entra por mí está a salvo. Circula libremente y encuentra alimento.» Jn. 10, 9
  • Piensa en tu propia experiencia de fe, ¿de qué manera Jesús ha sido una puerta para tu vida?
  • Piensa en tu vida, ¿Cómo puedes ser «puerta» para que los demás encuentren a Dios?
  • Propuesta ¿Qué características y actitudes de vida puedes proponerte cambiar en este tiempo, para mejorar tu misión?
  • Ofrécele tu oración al Señor y pídele fuerzas para ser fiel a su Palabra y a su testimonio.

Orar desde lo que somos. No desde lo que tenemos o nos creemos. Orar desde lo más íntimo y profundo de nuestro ser. Orar con nuestras miserias y esperanzas con nuestras heridas y anhelos, desde nuestra pobreza y confianza. Orar sin orgullo, sin comparaciones, con respeto, mirando a los ojos de Dios. No justificarse ante Dios; dejar que sea Él quien nos justifique.



Oramos por. . .


  • Este tiempo de ayuno y oración en que podemos encontrarnos con el Señor en forma tan íntima.
  • Nuestras vidas, que sean puertas abiertas para recibir a otros/ otras que lleguen hasta nosotros.
  • Las familias que tienen que enfrentar grandes preocupaciones (trabajo, enfermedad, vivienda), para que no se trasladen a las relaciones familiares, sino que puedan sostenerse unos a otros con valor y sinceridad.
  • Por el inicio de las actividades escolares, que sean lo mejor para todos. Oramos por el alumnado, por los docentes y directivos que van a comenzar un tiempo nuevo, distinto, en las mismas escuelas, sintiendo que ninguno es igual por haber atravesado tiempos de aislamiento, de clases virtuales, tal vez tiempos de enfermedad o pérdida.
  • Allí te pedimos Señor una misericordiosa bendición desde lo alto, que puedan sentir tu mano abrigando a cada uno, para que todos vuelvan a sentir que es el lugar dónde se aprende y se comparte, donde se juega y también se crece.

Las Comunidades de Fe:

  • ¡¡Mar del Plata está orando para ver crecer la Iglesia con jóvenes, niñas y niños!! ¡¡Cuando los hermanos y hermanas oran juntos el Señor manda bendición!!
  • Distrito Córdoba: Que tu Consuelo oh Dios llegue a las familias que están atravesando problemas económicos, de salud y de relaciones. Restaura y transforma nuestras familias.
  • Distrito Norteño, para poder programar actividades juntos, para crecer como distrito…
  • Por la comunidad de Tucumán, Pido que oremos por sus jóvenes y adolescentes, por sus hogares, y que el Señor los ilumine para tener un encuentro personal y reconocerlo como Señor de sus vidas…
  • La Iglesia Nacional, el Obispo, los Pastores y Pastoras, que siguen sosteniendo la comunión en sus lugares habituales de mil formas diferentes virtuales o presenciales.


DIOS te tiene en su agenda cada día y te bendice, sé agradecida/o con su bendición.

¡¡¡Hasta la próxima semana!!!

Pastora Cristina Dinoto
Comisión Nacional de Liturgia IEMA

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