Paz y bien amada hermandad.
Que la jornada de cada una y uno de ustedes sea inspirada e iluminada por el mismo Espíritu de Jesús.
«Dios los ama a ustedes y los ha escogido para que pertenezcan al pueblo santo. Revístanse de sentimientos de compasión, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia»
Col 3.12
Pablo nos recuerda que somos amados y amadas, elegidas y elegidos por Dios para llevar su amor y compasión al mundo. Nuestro atuendo debe caracterizarnos como personas misericordiosas, mostrando empatía y comprensión hacia los demás. La bondad y la humildad también son atributos esenciales que debemos poseer, siendo amables y considerados con quienes que nos rodean.
La mansedumbre y la paciencia son esta nueva vestimenta, este renovado estilo de vida que incluye: (1) entrañable misericordia «splagchnizomai» esta es la cualidad del buen samaritano, de aquel que se compadece de la tragedia de una persona y le presta ayuda (2) benignidad «jristotis» es la amabilidad con la que se actúa (3) humildad «tapeinofrosíni» actitud de servicio alegre hacia el prójimo, característica fundamental en la iglesia (4) mansedumbre «prautis» define a los que han renunciado a la violencia y depositan su confianza en Dios (5) paciencia «makrothimía» define la demora de la explosión de la ira, es característica de la persona sabia; esta paciencia se nutre a través de la perseverancia.
Te dejo algunas inquietudes para reflexionar. ¿Incluye el proceso de discipulado de mi comunidad cristiana una manera de vivir, o solo una manera de pensar? ¿Cómo evaluamos en comunidad nuestra manera de vivir? ¿De qué maneras práctica desarrollamos el estilo de vida y las virtudes a las que Pablo hace referencia?
Oramos pidiendo ser arropados y arropadas con los atributos de la gracia de Jesús el Cristo, para construir relaciones saludables caracterizadas por el amor del Dios de Jesús.
Abrazo cálido y sereno en Cristo Jesús.
Pastor Américo Jara Reyes
Obispo
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