Vigesimoprimer domingo después de Pentecostés

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Salmo 119:137-144; Habacuc 1:1-4; 2:1-4; 2ª Tesalonicenses 1:1-4, 11-12; Lucas 19:1-10.

Evangelio de Lucas 19.1-10: Zaqueo, un rico cobrador de impuestos, sube a un árbol para mirar a Jesús. Jesús decide invitarse para visitar al publicano. Y todos murmuran contra Jesús. Mientras, Zaqueo se propone devolver todo lo que ha defraudado. Y el Maestro recuerda que él ha venido a buscar y a salvar a quienes se habían perdido.

Profeta Habacuc 1.1-4; 2.1-4: ¿Hasta cuándo, Señor, clamaré a causa de la violencia y no vendrás a salvarnos? Los impíos asedian a los justos y se tuerce la justicia. Pero quise mantenerme vigilante, hasta que el Señor me respondió: los injustos e injustas son arrogantes, pero el justo vivirá por su fe.

2da Carta a los Tesalonicenses 1.1-4, 11-12: Comunidad querida, damos gracias a Dios por ustedes, que han soportado las persecuciones y sufrimientos; Oramos que Dios cumpla con su poder todo buen propósito y que Jesucristo sea glorificado en ustedes, y ustedes en él.

Salmo 119.137-144: Señor, tú eres justo, tus mandatos son justos y verdaderos. Y me consume el celo que siento por tus palabras. ¡Tu justicia es siempre justa!

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