Tercer domingo después de Pentecostés

Salmo 77:1-2, 11-20; 2º Reyes 2:1-2, 6-14; Gálatas 5:1, 13-25; Lucas 9:51-62

Lucas 9.51-62: Cuando se acercaba el tiempo en que Jesús iba a subir al cielo, emprende con valor su viaje a Jerusalén, reprende a quienes quieren hacer caer fuego del cielo…y varias personas quieren seguirlo, pero todos tienen alguna dificultad…

2 Reyes 2.1-2, 6-12a: Cuando el Señor iba a llevarse a Elías al cielo en un torbellino, Eliseo no quiso dejarlo solo a su maestro, por dos veces. Eliseo le pide a Elías que le dé una doble porción de su espíritu. Entonces un carro de fuego se lleva a Elías.

Gálatas 5.1, 13-15, 22-25: Cristo nos dio libertad para que seamos libres, manténganse ustedes firmes en esa libertad, sírvanse unos a otros por amor, cuídense mutuamente y vivan en amor, alegría, paz.

Salmo 77.1-2, 8-9, 11-15: A Dios clamé cuando me vi angustiado, y él me escuchó. ¿Acaso se agotó por siempre su misericordia? Hago memoria de tus obras, Señor, cuando diste libertad a tu pueblo…