Desde la Iglesia, garantizar la vida abundante y la ampliación de derechos
«Dios nos llama a practicar la justicia y amar la misericordia. Dios nos formó y quiere que seamos una señal de su alianza con el pueblo, una luz para todo el mundo.»
Isaías 42:6
En la Iglesia Evangélica Metodista, tenemos desde hace ya varios años, un equipo de trabajo específico para pensar y promover acciones en pos de prevenir y erradicar las violencias hacia poblaciones vulnerables.
Y porque concebimos un evangelio que viene a alcanzar la vida de todas las personas, de todas sin distinciones, y a transformar nuestra forma de vivir, de ser sociedad, hemos sido y seguimos siendo una iglesia respetuosa de los derechos humanos, porque entendemos que los mismos son garantías fundamentales e inalienables para la vida digna.
Si bien, como iglesia que proclama las buenas noticias de vida plena y abundante, rechazamos todo tipo violencias hacia cualquier persona. Entendemos que por la inequitativa falta de acceso a oportunidades y efectivo ejercicio de derechos las mujeres, las niñas, niños y adolescentes, las personas de la diversidad sexual, adultos mayores, migrantes, personas con discapacidad, las pertenecientes a pueblos originarios, entre otros grupos, se encuentran en situación de vulnerabilidad, y revertir eso, requiere de políticas y acciones específicas, dentro y fuera de la iglesia.
¿Por qué? Porque las violencias hacia las mujeres y diversidades son una realidad que posee cifras estremecedoras, que continúan en ascenso llegando a 274 muertes promediando el año, un 15% mayor en relación con el 2023. Porque las niñas, niños y adolescentes están en riesgo constante cuando una sociedad piensa que, para resolver la situación de inseguridad, hay que bajar la edad de punibilidad, siendo que en Argentina menos del 2% de los delitos son cometidos por personas menores de edad.
Por eso, desde la Iglesia Metodista Argentina en los últimos años venimos construyendo para las comunidades de fe que la integran, protocolos para la prevención y/o intervención ante situaciones de violencia o discriminación hacia mujeres, personas de la comunidad LGTBIQ+, niñas, niños y adolescentes, y estamos desarrollando una política general de cuidado y prevención de las violencias. Porque queremos ser parte activa de aquello que ayude a deconstruir las violencias que nos atraviesan y que tanto nos alejan del Reino de los cielos, al que Jesús anuncia aquí y ahora.
En medio de tantas voces, reafirmamos que las violencias de género son una realidad que nos atraviesa como humanidad caída, que las desigualdades de género contradicen el evangelio liberador de Cristo y que en su seguimiento, como cristianas y cristianos, nos comprometemos en seguir trabajando por la igualdad y equidad para todas la personas, recordando que seguimos a un Jesús que siempre se identificó con las personas más vulnerables, con las marginadas, y eso hoy incluye principalmente a las mujeres, las diversidades, las niñas, a los niños y adolescentes.
Próximas actividades
- “Resignificar la vida y la Fe”. Encuentro Nacional de Mujeres. Pastoral de la mujer. 16, 17 y 18 de noviembre. Inscripción
- “Re Avivándonos”. Encuentro Nacional de Jóvenes. 11, 12 y 13 de noviembre. Inscripción
- Espacio de formación en promoción de derechos. Pastoral de la Niñez y Adolescencia, octubre 2024, distrito Córdoba.
- Protocolo para la prevención e intervención ante situaciones de violencia y discriminación por razones de género. Acceder
- Protocolo para la prevención e intervención ante situaciones de violencia y discriminación hacia niñas, niños y adolescentes. Acceder
- Programa “Juntas Marcamos un Nuevo Camino” transformando las violencias en acciones de justicia. Acceder
- “Los Pedros”, reflexiones sobre masculinidades. Noviembre 2024.