Un tiempo de quietud con Jesús
¿Qué hace de la Biblia un libro vivo?, ¿Qué la convierte en "Palabra de Dios" para nosotros?
La ESPIRITUALIDAD es una dimensión del ser humano tan necesaria para su supervivencia como los latidos del corazón, sin ella, el ser humano estaría incompleto.
Desde la perspectiva cristiana y evangélica metodista, la espiritualidad es la conciencia de la comunión con Cristo Jesús a través del Espíritu Santo. La espiritualidad se profundiza en tanto vamos recorriendo el camino de la Santificación, buscando llegar a una profunda relación con Jesucristo. Ése es el camino, dejarse inspirar a través de las guías para ser transformados personal y comunitariamente por el Espíritu de Jesús.
¿Qué hace de la Biblia un libro vivo?, ¿Qué la convierte en "Palabra de Dios" para nosotros?
Danos más sed, Señor, de tu palabra, no dejes que el sabor perdamos de ella y la vida, fugaz se deshidrate, o en embriagueces vanas se sumerja.
La naciente iglesia se construye por la fe en comunión y perseverancia. Acoge el anuncio de que Jesús es el Cristo, quién constituye comunidades como lugar de enseñanza, comunión, celebración y oración.
Que el Señor ilumine tus sombras, aclare tus dudas, guíe tus búsquedas, señale siempre al horizonte y lo renueve día a día con cada amanecer.
“… cuando tú des un banquete, invita a los pobres, los inválidos, los cojos y los ciegos; y serás feliz.”
Señor, bendice mis ojos para que sepan ver la necesidad y no olviden nunca lo que a nadie deslumbra; que vean detrás de la superficie para que los demás se sientan felices por mi modo de mirarles.
El llamado hecho por Dios a su Iglesia a través de la historia es el manifestar el Reino de Dios y su justicia.
Salgamos al mundo a desparramar semillas; semillas que lleven en su interior sueños de alegría, amor, amistad, que destilen ternura para hacer de la vida un lugar que invite a un tiempo nuevo, con abrazos y risas, con espacios de encuentro y libertad.
Somos desafiados y desafiadas a extender continuamente las mesas a las que nos sentamos, para oír los sueños y los deseos de los demás.
La Pastoral de la Ternura prioriza la dimensión afectiva, sensible, solidaria, empática y espiritual. En ella, la poesía, la pintura, la literatura, el juego y otras expresiones humanas son formas para relacionarnos en amor y aprender unas personas de otras.