Tiempo de ayuno y oración – Propuesta semanal para el 1 de enero 2020

01 Ene 2020
en Espiritualidad y devoción
Tiempo de ayuno y oración – Propuesta semanal para el 1 de enero 2020

Encuentro con Dios


Salmo 8 – RVC

Señor y Dios nuestro,
¡cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!
¡Has puesto tu gloria sobre los cielos!
Las alabanzas de los niños de pecho
son tu mejor defensa contra tus enemigos;
ellas silencian a tus vengativos adversarios.
Cuando contemplo el cielo, obra de tus dedos,
y la luna y las estrellas que has creado,

Me pregunto:
¿Qué es el ser humano, para que en él pienses?
¿Qué es la humanidad, para que la tomes en cuenta?
Hiciste al hombre poco menor que un dios,
y lo colmaste de gloria y de honra.
¡Lo has hecho señor de las obras de tus manos!
¡todo lo has puesto debajo de sus pies!
¡Todas las ovejas y todos los toros!
¡Todos los animales del bosque!

¡Las aves en el cielo y los peces en el mar!
¡Todo lo que surca las profundidades del mar!
Señor y Dios nuestro,
¡cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!


Alabad al Señor

Al umbral del año, Cristo salvador,
Todos te ofrecemos himnos de loor.
Por tus bendiciones recibidas ya,
¡Cuántas alabanzas te debemos dar!

Todas nuestras faltas tú conoces bien;
Todos los fracasos viste tú también.
Redentor amante, cada corazón
Limpia con tu sangre, danos tu poder.

Salvador divino, a quien Dios le da
Sobre tierra y cielo toda potestad;
Toma nuestra mano, danos tu perdón.
Hasta que tu rostro nos permitas ver.

W. T. T. Millham – Cántico Nuevo 419

Lectura del Día

Eclesiastés 3: 1-13 – RVC

1 Todo tiene su tiempo.
Hay un momento bajo el cielo
para toda actividad:
El momento en que se nace,
y el momento en que se muere;
el momento en que se planta,
y el momento en que se cosecha;
el momento en que se hiere,
y el momento en que se sana;
el momento en que se construye,
y el momento en que se destruye;
el momento en que se llora,
y el momento en que se ríe;
el momento en que se sufre,
y el momento en que se goza;
el momento en que se esparcen piedras,
y el momento en que se amontonan;
el momento de la bienvenida,
y el momento de la despedida;
el momento de buscar,
y el momento de perder;
el momento de guardar,
y el momento de desechar;
el momento de romper,
y el momento de coser;
el momento de callar,
y el momento de hablar;
el momento de amar,
y el momento de odiar;
el momento de hacer la guerra,
y el momento de hacer la paz.

¿Qué provecho obtiene el que trabaja, de todos sus afanes?10 Me he dado cuenta de la pesada carga que Dios ha impuesto a los mortales para humillarlos con ella.11 En su momento, Dios todo lo hizo hermoso, y puso en el corazón de los mortales la noción de la eternidad, aunque éstos no llegan a comprender en su totalidad lo hecho por Dios.12 Yo sé bien que para los mortales no hay nada mejor que gozar de la vida y de todo lo bueno que ésta ofrece,13 y sé también que es un don de Dios el que todo hombre coma y beba y disfrute de lo bueno de todos sus afanes.

 

A ver… Existe en el mundo un orden establecido por Dios que los humanos podemos comprender o no; pues, hay en la sociedad injusticias manifiestas que no podemos evitar. Y así imposible ordenar esfuerzos con la seguridad de que serán coronados por el éxito. Por otra parte, podemos sentir la preocupación de los destinos del más allá, pero ignoramos lo que ocurre después de la muerte, porque no nos queda otra cosa que gozar de los bienes de este mundo en la medida que nos es posible; tal como cantaba Juan del Encina (1469-1529)« Hoy comamos y bebamos y cantemos y holguemos, que mañana ayunaremos. »

 

El nacer y el morir son los acontecimientos más importantes de nuestra vida, aparecemos; sin darnos cuenta, de improviso somos y existimos y de la misma manera “nos vamos” sobre los que Dios ha tendido misteriosos velos que la sabiduría humana no acierta a descorrer. Uno y otro tienen su momento señalado por Dios, y en ese mismo momento tendrán realización, sin que los humanos podamos adelantarlos o retrasarlos.

 

En un pueblo agrícola como el hebreo, plantar y arrancar lo plantado es una de las ocupaciones más frecuentes. Dios, al disponer las diversas estaciones, ha establecido las condiciones atmosféricas que determinan el tiempo en el que el hombre debe llevar a cabo las diferentes faenas del campo. Acciones desagradables, como herir y, en consecuencia, curar; las mismas obras encaminadas a destruir y edificar están dentro de los planes de Dios, que en sus inescrutables designios ha permitido las circunstancias que determinaron tales hechos. No existe la casualidad, y atribuir a ella supuestos efectos es sencillamente reconocer nuestra ignorancia.

De la misma manera, es Dios quien nos proporciona una veces alegrías, y entonces reímos y danzamos; otras motivos de tristeza, y entonces lloramos y nos lamentamos. Lo primero tenía lugar sobre todo en las fiestas de bodas; lo segundo, en los días de luto.

El v.5 contiene la expresión más oscura: hay momento en que se esparcen piedras y el momento en que se amontonan. Dado que los términos no son muy precisos y el contexto no da luz alguna, no es del todo claro a qué se refiere el autor. Los comentaristas suelen referirlo a la acción del enemigo, que esparce piedras por el campo para hacerlo estéril, y la del dueño, que las recoge para que pueda ser cultivado.

Por último… Nuestra reflexión nos hace pensar que el filósofo del Eclesiastés cree que todo nuestra existencia está predeterminada por Dios y que el ser humano no puede decidir o elegir; sin embargo, el darnos cuenta que nos es así es como enseñaba San Pablo; «Cristo nos dio libertad para que seamos libres. Por lo tanto, manténganse ustedes firmes en esa libertad y no se sometan otra vez al yugo de la esclavitud. » (Gálatas 5:1)y como hemos dicho alguna vez “cada quien puede elegir el mal o el bien que desea vivir”.

Con deseos de paz, bien y muchas bendiciones; para todas y todos, en este Nuevo Año que iniciamos juntos y en comunión.

AMÉN.

ROG

Motivos de Oración

  • La restauración de la salud de nuestros enfermos.
  • La libertad de los que están injustamente, en cautiverio.
  • Quienes están esperando un/a nuevo/a hijo/a.
  • Por nuestras abuelas, abuelos, que necesitan de nuestro acompañamiento y ayuda.
  • La iglesia y su trabajo en la misión, los derechos humanos, sociales y el trabajo en la educación.
  • Los campamentos proyectados en este mes.
  • Para que, en este nuevo año, logremos la unión en nuestro pueblo, la mano solidaria, el acercamiento de los familiares o amigos que estén distanciados y poner en marcha los desafíos que tengamos proyectados, tanto a nivel personal, familiar, comunitario, laboral y de estudios.

Recomendación y Bendición Apostólica

Tengan unos con otros la manera de pensar propia de quien está unido a Cristo Jesús, el cual:

Aunque existía con el mismo ser de Dios,
no se aferró a su igualdad con él,
sino que renunció a lo que era suyo
y tomó naturaleza de siervo.
Haciéndose como todos los hombres
y presentándose como un hombre cualquiera,
se humilló a sí mismo,
haciéndose obediente hasta la muerte,
hasta la muerte en la cruz.

Por eso Dios le dio el más alto honor
y el más excelente de todos los nombres,
10 para que, ante ese nombre concedido a Jesús,
doblen todos, las rodillas
en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra,
11 y todos reconozcan que Jesucristo es Señor,
para gloria de Dios Padre.

Filipenses 2: 5 – 11


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