07 – Nueva fiesta de Pentecostés
Guías Metodológicas
Libro de actividades 07
En el libro de los Hechos, el Espíritu Santo es el principal protagonista.
La Iglesia crece, se confirma en su identidad como nuevo pueblo de Dios abierto a todos los pueblos, y se multiplica numérica y espiritualmente, todo gracias a la acción poderosa del Espíritu Santo, que anima a la Iglesia para divulgar el Evangelio a todo el mundo.
Jesús, después de haber resucitado, se apareció a los discípulos por espacio de 40 días, dándoles muestras claras de estar vivo. Durante este tiempo el Señor va abriendo el entendimiento de los discípulos para que pudieran comprender lo que la ley de los profetas y los salmos decían sobre él mismo.
Cuando Jesús estuvo con ellos les pidió que esperaran la promesa del Padre, de que recibirían poder para ser testigos Evangelio en toda la tierra. (ver 1 :8) Había llegado ese momento. El cumplimiento de la promesa llegó en plena fiesta de Pentecostés.
Era usual que los judíos que vivían en el imperio romano se dieran cita en este tipo de celebraciones en Jerusalén. De igual manera es importante notar que en la celebración de Pentecostés se dio un fuerte testimonio de Cristo como Señor recogió la cosecha una gran cantidad de personas que se convirtieron al cristianismo.
Justamente la antigua celebración de Pentecostés era una fiesta agraria, de festejo por las primeras cosechas, pero luego pasó a ser una recordación de la liberación de la cautividad en Egipto, ver por ejemplo el pequeño “credo” histórico en Deuteronomio 26:1-10. Y ahora, de fiesta patriótica pasaré a ser la fiesta del nuevo pueblo de Dios.
El relato bíblico cuenta cómo se manifestó el Espíritu Santo cuando vino sobre los discípulos. De ninguna manera es cierta la acusación que hizo alguna gente de que los discípulos estuvieran borrachos, porque las costumbres de la época eran diferentes. Los judlos medían el día desde las 6 de la mañana a las 6 de la tarde. El desayuno se tomaba a eso de las 10.
Pedro niega la posibilidad de que ellos estuvieran borrachos, pues apenas eran las 9 de la mañana y ni siquiera habían desayunado. Era corriente beber vino durante las comidas -nunca en el desayuno- pues evitaban tomar agua debido a la contaminación del agua. La conducta que manifestaban tener los discípulos se debía a un poder divino y sobrenatural: el poder de Dios.
La promesa hecha por Jesús a sus discípulos se cumplió. En Pentecostés el Espíritu Santo vino para dar ánimo y renovar la vida a los discípulos, a fin de que viviesen en comunidad y tuviesen coraje para el trabajo que como seguidores de Jesús precisaban realizar.
Dios envía el Espíritu Santo, llamándonos a seguirle y transformando lo que está equivocado en nosotros. A través de su venida, Dios está presente entre nosotros. El Espíritu de Dios queda desde ahora disponible para cualquier persona, sin ninguna discriminación.
El Espíritu de Dios no nos pone ninguna condición, el Espíritu «sopla por donde quiere». (Juan 3:5-8). Por lo tanto basta con dejarlo hacer libremente en la vida de cada uno de nosotros para animarnos y capacitarnos para anunciar a Cristo resucitado y para trabajar a favor de la vida plena y abundante para todos.
¿Qué queremos lograr?
- Valorar la acción del Espíritu Santo en nuestras vidas.
- Expresar la gratitud a Dios por la disponibilidad de su Espíritu para toda persona.
- Reconocer que somos parte del nuevo pueblo de Dios, formado por gente de todos los pueblos de la tierra.
./ niñas/os no lectores
Contar la siguiente historia:
«Contentos y tristes», utilizando un títere de varilla con la figura de un varón:
– Hola chicos, yo soy Pedro y quiero contarles algo que nos pasó con mis amigos y mis amigas. Nosotros sabíamos que Jesús había resucitado, y por eso estábamos contentos. ¡Jesús estaba vivo! Pero ahora no lo veíamos como antes, y eso nos ponía tristes, porque lo extrañábamos.
Y un día que estábamos reunidos sentimos la presencia de Dios a través del Espíritu Santo. ¡Ahora no lo veíamos a Jesús, pero sabíamos que él estaba entre nosotros! Y eso es el Espíritu de Dios, es un soplo que nos trae la seguridad de que Jesús sigue estando con nosotros, aunque no lo veamos.
El Espíritu Santo es un soplo de Dios que nos ayuda a sentir la vida de Jesús en nosotros, y que nos pone tan contentos que le contamos a todos de Dios y de su amor, le contamos a nuestros amigos que Dios nos ama a todos y quiere que todos vivamos bien, con amor y dándole gracias por todo lo que nos da.
Comentar que Pedro y sus amigos eran amigos de Jesús y querían contarles a todos que Jesús estaba vivo y que podían darse cuenta de que Jesús estaba con ellos. ¡Qué alegría!
- Dar a cada niño/a una silueta de una figura humana de un tamaño pequeño (10 cm).
- Tener preparado un disco de cartón bastante grande. Pasar un hilo por la cabeza de cada muñeco y sujetarlo con el mismo hilo al cartón y poner todos según el modelo.
- Una vez que estén todos los muñequitos, soplar entre todos. Explicar que el Espíritu Santo es como el aire que hace mover los muñequitos, no lo vemos pero lo sentimos. Así también les sucedió a Pedro y a sus amigos. ¡Sintieron el Espíritu Santo y todos tuvieron muchas ganas de hablarle a todos sobre Jesús!
Ahora cuando volvamos a casa vamos a contar a otros lo que aprendimos para que también ellos y ellas sepan sobre Jesús.
- Dar a cada uno un pedazo de papel rojo y una pequeña parte de cartulina amarilla para hacer las lenguas de fuego. Pegar los colores juntos y engraparlos a una tira de papel blanco, a modo de vincha
ORAR.- dando gracias a Dios porque podemos sentir la presencia del Espíritu Santo y le pedimos que nos ayude a contarle de Dios a nuestros amigos. Orar juntos por los motivos presentados.
./ niñas/os lectores menores
- Mostrar una manga de viento.
¿Cuántos de ustedes saben lo que es esto?
Decirles a los chicos que esto es una manga de viento, un tipo de barrilete que fue inventada hace muchos años en Japón y se volaba en el “Día de los niños (varones)”. La familia colgaba una manga de viento por cada hijo en la punta de un poste fuera de su casa y dejaba que volara con el viento.
¿En qué otro lugar podemos encontrar una manga de viento?
Comentar que hay ~mangas de viento» en los aeropuertos. Las mangas de viento en los aeropuertos se usan para saber cómo está soplando el viento y ayudar a los pilotos a despegar y aterrizar con seguridad. También son usadas para predecir el tiempo y para ayudar a guiar a los pilotos de las naves espaciales a aterrizar en forma segura al regresar del espacio.
Nadie puede ver el viento, pero sabemos que está ahí porque la manga de viento nos lo demuestra. El viento es muy importante para nosotros.
¿Cuáles son algunas de las formas en que el viento nos ayuda? Nos ayuda a refrescamos cuando estamos acalorados, a limpiar el aire que respiramos de la contaminación ambiental, y puede convertirse en energía eléctrica para ser utilizada en nuestros hogares.
Leer el pasaje bíblico (en Hechos 2:1-15 y 36-42) o contarlo: Hoy, muchas iglesias celebran un día especial llamado Pentecostés. Fue en el día de Pentecostés cuando Dios envió a la iglesia nuevas señales de la presencia de su Espíritu. La Biblia nos dice que los apóstoles estaban reunidos en un lugar cuando de pronto se sintió el sonido como de una ráfaga de viento. Ellos vieron lo que parecían como lenguas de fuego que se posaban sobre cada uno de ellos y todos fueron llenos del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo de Dios es como el viento. No podemos verlo, pero sabemos que está ahí porque podemos ver los efectos de su poder en nuestras vidas. El Espíritu de Dios es muy importante para nosotros.
¿Cuáles son algunas de las maneras en que el Espíritu Santo nos ayuda?
- Nos conforta cuando estamos tristes y solos (Juan 15:26).
- Nos guía en el camino hacia la verdad (Juan 16:13).
- Nos ayuda cuando no sabemos cómo orar (Romanos 8:27).
- Vive en nosotros y nos da vida (Ezequiel 37:14).
- Nos muestra las cosas buenas que Dios tiene para nosotros (1 Corintios 2:9-11)
Estamos agradecidos por todas las formas en que el viento nos ayuda, pero sentimos más agradecimiento por todas las maneras en que el Espíritu Santo nos ayuda cada día. Puedes decir, ¡Él es el viento en tu manga!
Construir una manga de viento. Estas son las instrucciones:
Libro de Actividades
Imprimir 1: Manga de viento (Libro de Actividades)
Procedimiento:
- Doble la hoja de papel a lo largo para hacer una faja para el borde de la manga de viento.
- Haga un círculo con la faja y pegue los bordes con cinta adhesiva. Identifique el lado de afuera con la letra A.
- En el papel tisú use un marcador para dibujar una línea a 4 cm de una de las orillas y al otro lado del papel. Marque, con una B el área de 4cm x 28cm.
- Comenzando al final de la línea dibujada en el paso 3, mida y marque un punto a 3 cm del borde. Continúe marcando el borde con puntos adicionales a 3 cm. De distancia del anterior.
- Repita el paso 4 marcando los puntos en el lado opuesto del papel tisú.
- Una los puntos de los lados opuestos por medio de una línea. Corte en las líneas.
- Pegue el borde B del papel tisú a la parte A del borde circular que hizo en el paso
ORAMOS.- Querido Padre, te damos gracias por enviar tu Espíritu Santo para confortarnos, guiarnos y para que viva en nosotros. Amén.
./ niñas/os lectores mayores
- Pedir que se sienten alrededor de una mesa enfrentados, es decir, a cada uno le toca estar enfrente a otro.
- Repartir a todos un pedacito de papel de igual tamaño. Trazar una línea en la mitad de la mesa a lo largo.
- A la voz de comienzo soplar el papel para que pase la línea media lo más rápido posible. Cuando el papel del compañero que está. enfrente pasa hacia mi lado me lo quedo.
- Jugar así hasta que cada uno tenga el papel que le da el de enfrente mediante el soplido.
Contar que así como nosotros a través de la fuerza del soplido pudimos entregar un simple papel a otro, también podemos darte a otros algo mucho más importante si estamos dispuestos a recibir el soplo del Espíritu. Para saber cómo es esto tenemos que leer un pasaje de la Biblia.
Leer Hechos 2:1-15 y 36-42.
¿En dónde estaban los discípulos? ¿Por qué? ¿Qué recibieron? ¿Cómo reaccionó la gente? ¿Por qué Dios envió al Espíritu Santo?
Comentar que Dios envió al Espíritu Santo para enseñamos, guiamos, y ayudamos para servirlo mejor. Este ayudante tan especial es el Espíritu Santo. El Espíritu Santo vino con un poder muy grande para ayudarnos y amamos. La vida de los discípulos cambió totalmente cuando ellos recibieron el Espíritu Santo, lo mismo nos sucede a nosotros cuando lo recibimos. Sentir el Espíritu Santo es vivir una vida distinta, porque Dios nos guía y nos muestra cómo nos cambia.
Proponer la siguiente manualidad:
- Enrollar la mitad de una hoja de papel de manera que quede bien ajustada para formar una bombilla o usar directamente sorbetes.
- Entregar discos de cartulina o platos de papel
- Colocar gotas de témpera de color en los círculos y comenzar a soplar esa gotas para que se desparramen el color. Una vez que los platos estén coloreados de ambos lados cortar el plato en forma de espiral y atar un hilo, tanza, etc, en el centro del espiral poder colgarlo. Se puede pegar brillantina en los bordes del espiral y colgarlos en el salón o en el templo.
Comentar que sus espirales del Espíritu Santo con la pintura que soplaron se parecen al viento que sopló cuando el Espíritu Santo hace mucho tiempo llegó para ayudamos a todos.
¿Cómo podemos recibir nosotros al EspfribJ Santo en nuestra vida?
Comentar que el Espíritu Santo también nos mueve a nosotros a tener las palabras y el entusiasmo para hablar de Dios a otras personas. Cada vez que gire el espiral que hicimos nos ayudará a recordar cómo el Espíritu Santo llegó con amor para guiarnos y ayudarnos a servir a Dios y a los demás.
Ahora cuando volvamos a casa vamos a contarle a otros lo que aprendimos para que también conozcan a Dios.
Apóstol de Pentecostés
Material:
- un rollo de papel higiénico
- un pompón blanco (se puede sustituir por un pedazo de cartulina blanca con una carita feliz pintada)
- un pedazo de tela blanca o de lo contrario una servilleta blanca
- un pedazo de papel celofán rojo, uno naranja y uno amarillo
- un pedazo de lana roja
- un palito de helados
- pegamento, tijeras.
El cuerpo del apóstol es el rollo de papel higiénico cubierto con un pedazo de tela o servilleta blanca de papel, y con la lana roja atada alrededor de la “cintura”.
El rostro del apóstol puede ser un pompón blanco con ojitos dibujados o pegados, o el pedazo de cartulina, cortado en círculo, y con el rostro de carita feliz dibujado encima.
Cortar un cuadrado de papel celofán de cada color, y pegarlo al palito de helados, y el otro extremo del palito pegarlo al interior del rollo de papel higiénico.
ORAR.- dando gracias a Dios porque podemos sentir la presencia del EspírituSanto y le pedimos que nos ayude a hablarte de Dios a nuestros amigos para que también conozcan a Dios.
./ adolescentes
Leer Hechos 2:1-15 y 36-42.
El texto consta de dos partes: primero, la descripción de la venida del Espíritu Santo, y segundo los resultados del nuevo poder que obtuvieron del Espíritu.
¿Por qué fue importante que todos los discípulos estuvieran juntos?, ¿Qué significado tenían las lenguas de fuego sobre las cabezas?, ¿En qué sentido fueron transformados los discípulos además de ser conmovidos por el Espíritu?, ¿Cuáles fueron las consecuencias y evidencias en las actitudes, sentimientos y pensamientos después del cambio que tuvieron los discípulos? (versículos 41 y 42)
¿Creés que es posible que el Espíritu Santo transforme los corazones de la gente hoy como lo hizo cuando Pedro predicó para crear nuevas relaciones de familia, comunidad y naciones?
- Para conversar en grupo: Nosotros ya tenemos el Espíritu Santo, La Biblia dice que donde el Espíritu del Señor esté hay libertad. ¿Cómo podemos utilizar entonces la fuerza del Espíritu Santo?
Cuando el Espíritu Santo nos llena la vida, cuando nos inunda, recobramos las fuerzas y las ganas para vivir en justicia y nos disponemos a cambiar aquellas cosas que queremos mejorar en todo lo que nos rodea.
- Sin mencionar problemas personales, ¿podemos hacer una lista de aquellas cosas que podemos hacer por otros?
Ejemplo:
– Decir las cosas de otra manera.
– Utilizar la amabilidad.
– Ser puntuales, respetar los tiempos de los otros.
– Dar perdón
– Pedir perdón
ORAR.- al Señor pidiendo:
- Que se manifieste el poder de su Espíritu dentro de cada uno y dentro de la comunidad de fe.
- Que con nuestra forma de vivir, de hablar y de actuar, podamos atraer a otros a Jesús.