01 – La creación
Guías Metodológicas
Esta jornada no cuenta con Libro de Actividades
Génesis 1:1 – 2:4a
En tiempos antiguos se imaginaban muchas cosas sobre la forma del mundo y del universo. Por ejemplo, se pensaba que el universo estaba hecho de tres niveles: el cielo, la tierra y el mundo subterráneo. Se creía que la tierra era una superficie plana, que el cielo era como una bóveda (Salmo 19:1) sobre la cual había un gran océano, y que sobre él estaban las columnas que sostenían la tierra.
El relato de Génesis 1 tenía la intención de mostrarle al pueblo de Dios que Él era el creador de todo y superior a cualquier otro dios imaginado. Lo mismo sucedía con respecto a los astros, el sol y la luna, los cuales eran adorados como divinidades. Era común la creencia de que los astros regían el destino de los pueblos y de las personas.
El Génesis nos enseña que todo es una creación de Dios y que todo tiene una función asignada por Él.
Por eso la Biblia comienza con un himno al Dios creador, que no pretende decirnos cómo se hizo el mundo –eso lo dejamos para investigarlo nosotros, junto con todos los científicos– sino decirnos para qué está todo el mundo y toda la vida de Dios.
Apreciemos entonces todos los detalles y significados profundos de este himno al Dios Creador: la luz originaria de Dios sobre el mundo, el espacio para la vida humana y para los animales, y todo eso culminando con el hombre y la mujer, libres, nunca dominados, sino puestos ambos para disfrutar y prevalecer sobre todo lo creado, bajo el superior dominio de Dios. No es un dominio posesivo y menos un dominio depredador. El ser humano se ubica como un pequeño señor, pero al mismo tiempo como parte de la creación de Dios.
Tenemos entonces un himno de alabanza a este Dios creador, que todo lo hizo “muy bien”, como se repite después de cada “día de la creación”, y como canta el Salmo 8:
Cuando veo el cielo que tú mismo hiciste,
y la luna y las estrellas que pusiste en él, pienso:
¿Qué es el hombre?
¿Qué es el ser humano?
¿Por qué lo recuerdas y te preocupas por él?
…Señor, soberano nuestro,
¡tu nombre domina en toda la tierra!
Hay una infinidad de actividades que podemos hacer con este tema.
Sólo damos algunas sugerencias que ustedes deberán adaptar teniendo en cuenta las características de su grupo y el tiempo que disponen durante el encuentro bíblico.
¿Qué queremos lograr?
- Orar siempre con los chicos.
- Orar por cada uno de los niños y adolescentes de nuestros grupos.
Índice
./ niñas/os no lectores
Comenzar orando al Padre Creador.
Presentar el Himno al Dios de la Creación y junto con los chicos hacer la mímica con el cuerpo de la siguiente manera: Dios creó todo lo que hay en el mundo. Él hizo lo árboles y el sol el agua y los animales y a cada uno de nosotros también…
Representación de los días:
Día 1: Encienda las luces y colóquense de pie
Día 2: Levanten sus manos y formen nubes imaginarias. Luego balanceen su cuerpo de un lado a otro para imitar las olas del mar.
Día 3: Acaricien el suelo e imaginen levantar las flores.
Día 4: Con sus brazos hagan círculos grandes sobre sus cabezas.
Día 5: Hagan movimientos como las aves y acuéstense boca abajo e imaginen
Día 6: Imiten animales a su elección
Día 7: Acuéstense en el piso y descansen. Nadar como los peces.
Destacar las características que la naturaleza tiene en el lugar en el que viven.
Conversar cómo es en otros lugares. Si conocen otras ciudades o pueblos y qué cosas vieron allí.
También se puede hacer un dibujo individual sobre la creación.
Elegir un niño y decirle al oído el nombre de un animal que debe imitar y todos adivinar de qué animal se trata y ponerlo en el panel de la creación.
Otra actividad puede ser que cada niño haga su propio libro de la Creación en donde en cada hoja se dibuje cada día de la Creación.
Compartir galletitas con forma de animales.
Cantar.
ORAR.- dando gracias a Dios por su creación.
./ niñas/os lectores menores
Cierren sus ojos. ¿Qué ven? ¿Nada, verdad? ¿Se imaginan abrir sus ojos y no ver nada, todo este lugar vacío?
Así era en el principio con Dios. Todavía no había mundo, solo estaba un gran vacío de nada. Todavía no había luz, solo oscuridad. No había plantas, no había animales, no había gente. Solo existía Dios.
Dios está en todos los lugares todo el tiempo. Él nos conoce. Dios sabe lo que estamos pensando. Él sabe lo que hacemos ahora y todo el tiempo. Dios está en todos lados y sabe todas las cosas. Dios es grande y tiene un gran plan para nosotros. Él nos ama tanto que quiso compartir su historia con nosotros. Él quiere que conozcamos su gran propósito para nuestras vidas.
Colocar en cada caja un dibujo característico por cada “día de la Creación”.
Decir que vamos a aprender que Dios creó todo en los cielos y en la tierra; que tiene las cajas de la creación revueltas y que necesita que ellos colaboren para ponerlas en orden de nuevo.
Empezar con la historia de la creación.
Decir que deben poner atención a las palabras claves que pueden usar para poner las cajas en orden.
Dios hizo un mundo maravilloso, creó colores, formas y estaba muy contento con todo lo que había hecho. Vamos a celebrar la creación de Dios y su creatividad haciendo algo maravilloso.
Entregar a cada uno un pedazo de 15 cm de cinta de embalar transparente (cinta stiko ancha) y que coloquen solamente en una mitad lo que juntaron armando un diseño. Repartir también brillantina para que usen en su obra de arte. Doblar por la mitad de la cinta y de esta manera quedará armado un cuadrito o un prendedor.
ORAR.- que cada uno diga qué es lo que más les gusta del mundo que Dios ha creado y dar gracias por ello.
Se puede escribir en un afiche y dibujarlo.
./ niñas/os lectores mayores
¿Recuerdan algo que hayan hecho con sus propias manos y si les costó trabajo hacerlo?
Conversar sobre lo que hacen los albañiles, los artistas, ingenieros, artesanos, etc.
Quizás haya alguien en la congregación que puede contar lo que hace con sus manos.
Conversar con los chicos que nosotros siempre necesitamos tener algo para crear otra cosa.
Por ejemplo, tener masa de harina y sal o arcilla y pedir que hagan alguna de las cosas de la creación, sol, estrellas, luna, árboles, plantas…
¡Dios hizo todo desde el principio!
El espíritu de Dios andaba sobre las aguas del caos, del tiempo sin orden ni propósito, y entonces Dios comenzó a crear nuestro mundo…
¿Quién hizo la luna y las estrellas? ¿Quién hizo las plantas y los árboles?
¿Podemos hacer este tipo de cosas? ¿Podemos crear una montaña o un océano? ¿Podemos crear una estrella y ponerla en el cielo? ¡Qué lindo cómo empezó nuestro mundo!
Leer en la Biblia el poema de alabanza al Dios de la creación (Génesis 1.1 a 2.4a.)
Hacer un mural de la creación que podrán ir cambiando o agregándole cosas a lo largo del año.
¿Por qué creen que Dios dijo que todo lo que había creado era bueno? ¿Por qué Dios cuidó todos los detalles en la creación como el color y la textura?
Comentar que Dios no creó el mundo desparramando las cosas a lo loco, sino que hizo cada cosa perfecta y después vio que era buena. Dios nos expresa su amor a través de la creación que es perfecta hasta en sus más mínimos detalles: en la forma de las hojas, en el color de las flores…
./ adolescentes
Leemos el Himno de alabanza de Génesis 1.1 a 2.4a.
Destacando con resaltador los distintos elementos que hacen de este texto un poema o un himno: repeticiones como “Dios dijo”, “y así fue”, “de este modo se completó el primer día”…, “y vio Dios que todo estaba bien”, como si fuera un coro que va contestando al presentador…
En el principio… ¿Y ahora cómo es? ¿Cuánto de ese mundo del principio ha cambiado?
El Himno de alabanza al Dios de la creación es una forma de decirnos que Dios hizo todo, y que todo lo hizo bien con un propósito bueno.
Podemos explicar el surgimiento del mundo desde la ciencia, pero eso no contradice que la mano de Dios es la que está presente por sobre todo. No negamos lo que la ciencia pueda decir, explicar o tratar de entender desde la lógica científica pero desde la fe creemos y sostenemos que vemos la mano de un Dios creador y todopoderoso en cada acto de creación de vida.
Así como podemos explicar la concepción, el nacimiento de un niño, sabemos que es Dios quien lo hace posible y que el milagro de la vida es obra de Dios.
En los tiempos antiguos se pensaba que el universo estaba hecho de tres niveles: el cielo, la tierra y el mundo subterráneo. Se creía que la tierra era una superficie plana, y que el cielo era como una bóveda sobre la cual estaba un gran océano sobre el que estaban las columnas que sostenían la tierra.
El poema de Génesis 1 tenía la intención de mostrarle al pueblo de Dios que Él era el creador de todo y superior a todos los dioses imaginables. Lo mismo sucedía con respecto a los astros, el sol y la luna, los cuales eran adorados como divinidades. Era común la creencia de que los astros regían el destino de los pueblos y de las personas. El Génesis nos enseña que todo es una creación de Dios y que todo tiene un propósito bueno y hermoso.
Les hacemos ver a los Adolescentes que nosotros necesitamos tener algo, alguna cosa ya creada para hacer o crear otra. En cambio Dios hizo todo nuestro mundo desde el principio. Su espíritu andaba por el agua y así él comenzó a crear.
”Y vio Dios que todo estaba bien”, así dice en varias partes el poema de la creación y está puesto así porque todo lo que existe es bueno y procede de Dios y corresponde a un propósito. En contraste con lo que los paganos creían que era un mundo creado por dioses caprichosos sin propósito alguno, o como incluso alguna gente hoy prefiere pensar que todo este mundo maravilloso fue el resultado de muchas casualidades…