Recursos para la liturgia del culto comunitario

Oración de la rebeldía

Llego ante Ti, Señor, con humildad
a pedirte rebeldía.
Quiero vivir comprometido con la justicia.
No venderme por nada ni ante nadie.
Resistir la tentación de buscar una falsa paz,
de la comodidad y la ceguera.

Hazme un inconforme con el error, la injusticia, el odio,
un insatisfecho con la farsa del mundo,
pero con un gran deseo de trabajar por mejorarlo.

Hazme un indómito de tu Reino,
que es la fe y la justicia,
digno de recibir aquellas palabras tuyas:
"En el mundo tendrán apreturas;
pero tengan buen ánimo: Yo he vencido al mundo".

Autoría desconocida

Invocación

En nombre del Padre de todas las gentes
que nos hace nacer del amor y de la tierra.
En nombre del Hijo,
hermano de todos los hombres,
obrero en construcción del Mundo Nuevo.
En nombre del Espíritu de liberación,
inspiración materna de la Resurrección.

En nombre de los pueblos
olvidados y reencontrados,
eternos soñadores del Reino de Amor.

En nombre de la Vida, que es el otro nombre
de la justicia y de la paz.
En nombre de la fuerza,
de la lucha por la dignidad perdida,
por el trabajo intenso,
por el triunfo de la fe que vuelve a nacer,
cantamos al Señor de ayer,
de hoy y de mañana.

Adaptado de Carlos Alberto Rodrigues Alves. Red de Liturgia, CLAI

Oración por un encuentro, retiro o asamblea

El Dios de toda gracia y todo poder, por Cristo Jesús, Señor del mundo y de la Iglesia, nos llama a reunirnos como un solo cuerpo, para edificarnos como Iglesia viva y enviarnos al mundo para dar testimonio de su palabra.

Padre nuestro, celestial, que nos has convocado por Cristo Jesús, nuestro Señor, envía tu bendición espiritual para que, afirmados en tu palabra, podamos servir como tus testigos fieles en el mundo. Amén.

Festejamos juntos al Señor. Libro de Celebraciones IEM en AL, La Aurora, 1989, p 158.

En el libro de la vida - Lucas 10.20

Señor del cielo y de la tierra, cómo me gustaría
que mi nombre estuviera escrito en el Libro de la Vida!
Así también me gustaría que estuviera colgado
en una de las ramas del árbol que está creciendo.

O sostenido entre los pétalos de la rosa
que floreció en medio del jardín.

Me gustaría que lo llevaran en el pico aquellas aves que vienen a comer las migas a mi patio.
Y que el sol cada mañana lo iluminara estampado
por las nubes blancas sobre el azul del cielo.

Eso me recordaría aquello
por lo que tengo que seguir preocupada, aquello
de lo que soy responsable porque es tu creación.

Y sobre todo me gustaría leerlo en las caritas
de los niños que se me acercan,
en la timidez vestida de insolencia de los adolescentes y jóvenes cuando van creciendo,
y en las manos rugosas de los ancianos
que ya todo lo hicieron.

Todos ellos deben ser mi preocupación,
porque también son tus hijos.

Señor, Dios de toda la creación, si no encuentro
mi nombre escrito en tu creación
y en aquellos hermanos que pusiste a mi cuidado,
seguramente tampoco lo he de encontrar
en el Libro de la Vida.
Y entonces caeré de rodillas a pedirte perdón
por no haber sabido compartir tu amor. Amén.

Cristina Dinoto

Para ti, joven amigo

No descuides los dones que tienes y que Dios te concedió... 1 Timoteo 4.14

Pasamos lo mejor de nuestra vida
corriendo siempre sin llegar a nada;
se mata el tiempo en forma disipada,
pero es el tiempo al fin nuestro homicida.

¿Es que no puede en ti tener cabida
un noble pensamiento que te invada,
y que, cumpliendo su misión sagrada,
despierte el don que el corazón anida?

Si el tiempo se ha perdido en tanto yerro,
a escalar la montaña ya comienza:
¡No es tan alta la cima de tu cerro!

Cuánto quisiera yo que te convenza
aquel dicho genial de Martín fierro:
nunca pierdan el tiempo y la vergüenza!

Roberto Romanenghi, cita del “ Gaucho Martín Fierro”, de José Hernández, Canto XXXII, estrofa 1176.

Oración de invocación

Venimos hoy a tu casa Señor atentos a tu llamado, preparando nuestros corazones.

Padre bendito si continúas confiando en nosotros,
dispuesto a enviarnos al mundo,

Que en este día podamos llenarnos con tu Espíritu Santo, que renueve nuestras fuerzas,
selle nuestros labios con tu evangelio y llene de alegría nuestro corazón.

Que juntos preparemos nuestros pasos para salir al camino que nos señalas.

Y que tu Palabra en este día conmueva toda la comunidad.

En el nombre del Padre que dirige el camino,
del Hijo que nos recomienda y del Espíritu Santo que nos envuelve con su poder. Amén.

Cristina Dinoto

Himnos y Canciones

• Canto un nuevo canto (La nueva canción) - Simei de Monteiro. Brasil - CF 294
• El mensajero de la paz (El Señor envió a sus discípulos) – Anónimo - Versión jóvenes metodistas de Morón - https://m.youtube.com/watch?v=LsWKpyM7vGA
• En el hambre de nuestra ignorancia (Zamba de confesión) – Hugo Armand Pilón y Álvaro Michelín Salomón, Uruguay – CF 119
• En medio de la guerra – E Jones, RU – Mario Bustamante, Bolivia – CF 349
• No basta solo una mano – Juan Damián, Uruguay – Irene Schwiderke, Argentina – CF 304
• Que mi vida entera esté consagrada a ti – Frances Havergal, 1836-1879 – Tr Vicente Mendoza, 1875-1955 - Wolfgang Mozart, 1756-1791, Austria. Adapt. – CF 307